EL ORDENAMIENTO UNIVERSITARIO, UNA EPISTEME



La universidad está desafiada a proponer espacios para la constitución de saberes en la diversidad de sus producciones. La reflexión teórico-epistemológica puede ser el diseño de una estrategia de investigación, donde docentes y alumnos actuemos en la realidad social, educativa y cultural, y no intentemos vanamente explicarla desde una supuesta relación causa-efecto. Vamos por modos de enseñanza y aprendizaje que promuevan instancias de estudios críticos y reflexivos. Pensamos la construcción y distribución del conocimiento acerca de los sujetos de la educación y sus prácticas desde el cambio y a partir de la intervención de todos los actores en relación con las estructuras, las teorías y los métodos para un intercambio docente/alumno creativo en la lectura, análisis y producción del trabajo científico. Elegimos un marco de operaciones amplio y comprensivo que haga posible la circulación de posicionamientos epistemológicos heterogéneos y múltiples, aquellos que ponen de manifiesto la constitutiva incompletud de los saberes. Ante ciertas tendencias a desdeñar la investigación teórica y a separarla de la práctica y sus posibles “aplicaciones” decimos no hay mejor práctica que una buena teoría...


El eje de la propuesta lo constituye el tejido de las perspectivas teóricas y sus usos: efectos que vertebran los campos disciplinares de la carrera de medicina, sus implicancias epistemológicas y sus nudos problemáticos. La enseñanza de las ciencias debería ponernos en el camino del preguntar por la posibilidad de sus legitimaciones aún a riesgo de renunciar a ellas. ¿Admite la mirada médica profesional el cruce con otras formas de conocimiento?

Esperamos poder actuar como guía en este nuevo y maravilloso camino que, a partir de este año, se abre a ustedes, futuros médicos,
donde distintos saberes comenzarán a solicitarse unos a otros con vistas a una misma meta: abrir los cotos disciplinares.


Les damos una cálida bienvenida.
Cuerpo docente.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

Bibliografía de Antonin Artaud




Poeta francés nacido en Marsella en 1896.
Desde muy pequeño presentó cambios  de comportamiento que motivaron su reclusión en sanatorios mentales en diversas ocasiones.
En 1920 se radicó en París y publicó los primeros versos bajo el título "Trictac del ciel" en 1924. A raíz de su amistad con  André Breton, asumió el cargo de director de la oficina de investigaciones surrealistas, alternando su trabajo con la escritura de ensayos, guiones de películas y su  sobresaliente obra poética "El ombligo de los limbos".
En el año de 1936, su interés por la cultura solar lo llevó a convivir con los indios Tarahumaras  en México. 
Después de varios años de reclusión psiquiátrica, publicó en 1947 el ensayo "Van Gogh le suicidé de la Société" , galardonado al año siguiente con el Prix Saint-Beuve.
Murió en marzo de 1948 en el asilo de Ivry-sur-Seine. 


Para acceder al material, haz click aquí.


viernes, 13 de septiembre de 2013

"Cada uno se cura con lo que cree"


Foto: Mariana López de Tejada

¿Crisis de la Medicina o de la Antimedicina?

Chicos de la Electiva El Saber Médico: entre la Filosofía y la Literatura, les acercamos esta conferencia pronunciada por Michel Foucault en octubre de 1974. Quisiéramos pensar junto a ustedes y conocer sus opiniones acerca de la temática abordada.

Para ver la conferencia, hacé click aquí.

miércoles, 11 de septiembre de 2013

El Poder Psiquiátrico. Michel Foucault.

Chicos, les dejamos la clase del 21 de noviembre de 1973, la cual trabajamos en la clase de ayer.

Buen resto de semana!

Para ver la clase, hacé click acá.

domingo, 8 de septiembre de 2013

UNIDAD IV

Chicos, acá les dejamos material bibliográfico para esta nueva unidad temática que arrancamos a trabajar el martes.
Saludos y buen domingo.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

Pierre Bourdieu, creador de la sociología como topología social

Por Carlos A. Solero

-          Análisis de estructura, diferencia de clases, subjetividades y una mirada única sobre las formas de dominación.

2 sep, 2013



Pierre Bourdieu es uno de los pensadores contemporáneos más importantes de las últimas décadas del siglo XX. Sus estudios tienen aún en el presente impacto en diversas ciencias sociales como la sociología y antropología y en las investigaciones referidas a campos temáticos tan diversos como la educación, la familia, la televisión, la dominación masculina o la persistente miseria material y moral en el mundo.

Pierre Bourdieu nació el 2 de agosto de 1930 en Denguin, región de los Pirineos Atlánticos franceses. Estudió la carrera de filosofía en París en la École Normale Supérieure. Desde el año 1955 trabajó como profesor, en primer término en el Instituto de Mou Elins (Allier) y luego en Argelia entre los años 1958 y hasta 1960, también en instituciones de la capital francesa y en Lille. Es durante su período en Argelia que inició las investigaciones que dan fundamento al reconocimiento que años después alcanzará en el ámbito sociológico, a la par que realiza sus indagaciones liminares continúa sus estudios de posgrado.

Bourdieu es autor de una multiplicidad de libros, en 1958 se publicó Sociología de Argelia; en 1964 junto Jean Claude Passeron dan a conocer uno de sus célebres estudios sobre sociedad y educación: Los herederos, los estudiantes y la cultura; también en ese año Las funciones sociales de la fotografía y en 1965 un Art moyen. Ensayos sobre los usos sociales de la fotografía y retratos pedagógicos y comunicación.

La sociología de Bourdieu irrumpe en el ámbito intelectual, principalmente en Francia, pero se expande por la órbita occidental en pleno debate entre marxistas y estructuralistas, con figuras como Jean Paul Sartre, Louis Althusser; Roger Garaudy.

El pensador intentará superar estas disputas con un estilo personal que retoma a autores clásicos de la teoría social como Karl Marx, Emile Durkheim y Max Weber, retomando algunos de sus temas y parte de sus métodos, pero elaborando una concepción propia acerca de las relaciones de dominación.

Como señala la socióloga argentina Silvia Anguiano de Campero, en su perspectiva este autor considera a la sociedad como un todo estructurado en clases sociales que se encuentran en lucha. La idea de espacio social es la que da cuenta del carácter estructural de este todo. Este espacio Social se extiende como una red constituida por las relaciones entre las diferentes posiciones que los agentes ocupan en la distribución o posesión diferencial de ciertos bienes que dan poder en el mundo social de los agentes. Alrededor de estos bienes se generan espacios de juego históricamente constituidos con sus instituciones específicas y sus leyes de funcionamiento propias. Por lo que, el espacio social se nos presenta como un conjunto abierto de campos relativamente autónomos y más o menos subordinados en su funcionamiento y en sus transformaciones, al campo de la producción económica. El elemento central que delimita un campus es que hay algo en juego (el Capital) y gente dispuesta a jugar” a realizar las apuestas necesarias; a aceptar las reglas de juego o luchar por cambiarlas, definir las cartas de triunfo o luchar por la definición misma de lo que está en juego. Esta es la lógica de la lucha por el poder que define y delimita un campo. El capital, como poder vigente en cada campo, actúa como principio de construcción de la diferenciación social entre posiciones que delimitan el espacio social. Este capital es el que está en juego en cada campo y lo que permite, a su vez, distinguir diferentes campos, fuertemente interdependientes, conforme al tipo de capital en juego (capital económico, cultural simbólico y social).

“Las diferencias sociales –continúa Anguiano de Campero– se objetivan en tipos de bienes, casas, vestidos, modos de hablar de relacionarse, y se subjetivizan, en modos de ver, de pensar propios de la posición social del agente. El espacio social se convierte así en espacio social simbólico, constituido por grupos de estatus con diferentes estilos de vida. Esta estructuración objetiva no privilegia el factor económico aunque reconoce su fuerza, ya que según este autor, las clases sociales dibujadas en el papel, construidas por el investigador (siempre en contacto con los datos) no se construyen por la consideración de un sólo factor ni una suma de factores, sino por la estructura de todas las relaciones entre todas las propiedades pertinentes que confieren a cada una de ellas su valor propio. Condiciones objetivas y objetivaciones simbólicas contribuyen a la diferenciación social y la distinción simbólica entre las clases sociales”.

Ahora bien, el mundo social está estructurado objetivamente, pero la posición que se ocupa en este espacio somete a los agentes a un condicionamiento semejante y por ello es probable que se adquieran disposiciones (formas de pensar, de percibir, de ver, de dividir y de evaluar, necesidades, capacidades, etc.) semejantes (habitus) que a su vez determinan una fuerte probabilidad de producir prácticas semejantes. Las estructuras objetivas son incorporadas por un trabajo de inculcación (instituyente) como estructuras subjetivas, ésto es, como criterios clasificatorios, modos de ver, percibir y decir que lo dejan dispuesto al agente para producir prácticas igualmente enclasables. Por ello el habitus es principio generador de prácticas y sistema de enclasamiento de esas prácticas que permite construir el “mundo social representado”, dando las bases para la comprensión del “sentido común”. Las representaciones que los agentes se hacen del mundo social, contribuyen a la construcción de ese mundo. Los sistemas simbólicos son instrumento de conocimiento y construcción de lo real. Estas representaciones constituyen un “punto de vista” o “vista tomada desde un punto” (desde la posición social que el agente ocupa).”

En una conferencia pronunciada en Tokio (Japón) el 4 de octubre de 1989, titulada Espacio social y espacio simbólico, Bourdieu afirmó: “Toda mi empresa científica se inspira en efecto en la convicción de que no se puede asir la lógica más profunda del mundo social sino a condición de sumergirse en la particularidad de una realidad empírica, históricamente situada y fechada pero para construirla como caso particular posible, según las palabras de Bachelard, es decir como un caso de figura en el universo finito de las configuraciones posibles.”

Cabe apuntar que la bibliografía legada por Pierre Bourdieu es muy extensa. En 1970 aparece Fundamentos de una teoría de la violencia simbólica. Reproducción cultural y reproducción social, escrita junto a Jean-Claude Passeron. En 1976 El sistema de las grandes escuelas y la reproducción de la clase dominante.

Entre otros múltiples trabajos se publica La distinción. Critique social del gusto en 1979, Qué significa hablar en 1982, Homo academicus en 1984, La Nobleza de Estado. En 1993 Bourdieu coordina un equipo de investigación titulado La miseria del mundo, allí denuncia el sufrimiento social, que impone el neoliberalismo, retoma elementos del materialismo histórico del pensamiento de Michel Foucault, y traza, en una combinación de sociología y antropología social, la radiografía de la exclusión social, de los desheredados de la modernización, del progreso tecnológico y de la globalización.


Bourdieu fue también un activista social que acompañó las luchas de los trabajadores. 
Murió en enero de 2001.